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A raíz de un post de fotografía de fauna de otro usuario, surgió el tema de a que velocidad de obturación se obtiene nitidez al realizar una fotografía, y quería dejar un par de datos y técnicas que me han resultado ser útiles.
La regla general que se repite en todos lados es que para un sensor full-frame y un lente no estabilizado no se debe disparar a una velocidad de obturación menor a la de la longitud focal utilizada a fin de evitar trepidaciones (foto movida), pero como casi toda regla en fotografía, no es un absoluto sino una guía que ayuda a conseguir resultados aceptables. Por ahora tengámosolo como un punto de partida y avancemos sobre las causas y soluciones posibles.
La causa de la trepidación es el movimiento de la cámara durante el período que el sensor esta expuesto, y arruina por completo la nitidez de nuestra exposición. Si esperamos nitidez en nuestras fotos, entonces la trepidación no es aceptable en el resultado.
Para minimizar la posibilidad de trepidaciones existen accesorios, tecnologías y técnicas para ayudarnos.
Los accesorios pueden ser trípodes, monopiés, una piedra donde apoyar la cámara, un disparador remoto, etc. que nos permitan realizar el disparo del obturador sin depender de nuestras temblorosas manos.
Trípodes y monopiés ayudan a disminuír la ocurrencia de un trepidado, y a descansar los brazos durante sesiones largas, pero no siempre los tenemos encima o nos resultan prácticos para la situación.
IMG_7259 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Las tecnologías que ayudan son los estabilizadores de imagen (que pueden estar incorporados al lente o al sensor, dependiendo del equipo que usemos), el bloqueo de espejo (mirror lock-up) en las réflex que lo permiten, o el uso de flash para congelar el movimiento.
Pero el objetivo de este post es referirme a algunas técnicas básicas que pueden ayudar a disminuír la ocurrencia de trepidaciones, sobre todo cuando no dispongamos, o no sean prácticos, el uso de accesorios o tecnología.
Primero: Cuanto mas larga la longitud focal, mayor la posibilidad de tener trepidaciones a mano alzada. Esto quiere decir que es mas probable tener trepidaciones a 300mm de focal que a 18mm. Esto es debido a que con una longitud focal larga, lo que vemos por el objetivo es una parte muy pequeña de la imagen (un ángulo de enfoque muy estrecho) y es difícil mantener apuntado algo tan pequeño a pulso. Prueben con el tele mas largo que tengan, con el codo apoyado, enfocar un objeto distante (una antena en un edificio lejos, un árbol lejano) y van a ver que es dificil mantenerlo centrado. Esta dificultad de mantener fijo el sujeto un par de segundos es lo que produce la trepidación en las fracciones de segundo que dispara el obturador. La diferencia es que para nuestro ojo toda exposición es de 1/24 segundos siendo inmediatamente reemplazada por la siguiente exposición, y el cerebro corrige los defectos, pero para el sensor, no existe corrección.
Lo importante del párrafo anterior es que a mayor longitud focal se hace mas crítico el tema de las trepidaciones. Sobre todo porque a medida que la longitud focal es mas larga, precisamos velocidades de obturación mas breves, hasta el punto que puede que la luz disponible, la apertura o el iso no sean suficientes como para compensar. Me resulta muy común en los atardeceres tener que cambiar de lente porque la velocidad mínima con el teleobjetivo me resulta en una exposición demasiado oscura, mientras que con un lente mas corto puedo bajar la velocidad de obturación con menor riesgo de trepidación.
Gabriel Luque, quien es a mi juicio el mejor fotógrafo aeronático del pais, con su 500mm+extender x2 (1000mm) montado sobre un trípode con gimball que estaba probando. Mas tarde se cansó de usar el trípode (no le resultaba cómodo) y terminó disparando a mano alzada con longitud focal de 1000mm... y con una nitidez inigualable en las fotos que publicó.
Gabriel Luque by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
La primer técnica a utilizar es una buena postura de toma. Si uno está en una posición inestable, se va a mover durante la exposición y la foto va a salir trepidada. En muchos lugares se recomienda pararse con los pies en distinto plano (no paralelos) uno levemente mas adelante que el otro, y el pie trasero apuntando en ángulo hacia afuera. Se recomienda también mantener los codos pegados al cuerpo. Si bien esta postura es estable, muchas veces no es posible debido al tipo de toma que vamos a realizar, o puede que el tamaño del equipo nos impida poner los codos pegados al cuerpo. Mi recomendación es una postura que nos resulte natural y cómoda. Cualquier pose que nos ponga en tensión resiente el pulso, y resulta en movimientos involuntarios que no son deseables. Sin embargo, como nada es absoluto, algunas posturas poco naturales ayudan a generar un punto de apoyo en casos determinados y ensayarlas hacen que el cuerpo se acostumbre a hacerlas sin ponerse en tensión.
Una postura que al menos a mi me resulta incómoda y por ende, inestable. Si tuviera que realizar una toma desde ese ángulo, a una velocidad de obturación baja, apoyaría la rodilla en el suelo, pero nada es absoluto ni definitivo para todos. Esta señora debe tener mas equilibro que yo, o debe usar velocidades de obturación mas altas o un lente estabilizado.
IMG_4287 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Un lente mas corto o menos pesado permite mantener la mano mas cerca del cuerpo de la cámara, y el brazo de apoyo mas cerca del torso
IMG_0479 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Es importante que la mano izquierda sostenga el peso de la cámara cerca o en su centro de gravedad. En el caso de teleobejtivos largos, en general esto significa que la mano izquierda sostiene el teleobjetivo y no la cámara. Esto no varía para zurdos o diestros porque las cámaras tienen el obturador del lado derecho.
En este caso vemos que la mano izquierda sostiene el lente cerca del centro de gravedad, o del soporte de trípode que esta ubicado en el mismo lugar y con el mismo fin. Los codos no pueden estar pegados al cuerpo debido a que el sujeto de toma esta en una posición elevada. Sin embargo no es una postura forzada o tensa mas allá de lo necesario para la toma
IMG_3946 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Cualquier postura que nos brinde un punto de apoyo estable extra también es recomendable, por ejemplo apoyar el codo izquierdo sobre un objeto fijo como ser una baranda o el suelo, apoyar la espalda o un lado del cuerpo contra una pared, recostarse boca abajo en el suelo, o poner una rodilla en el piso pueden ayudar, siempre que no quedemos en una posición excesivamente incómoda o tensa, proclives al tembleque de manos.
En este caso, vemos que el peso del equipo cae sobre la cara de la fotógrafa. Nada aqui es una ley absoluta y la postura es válida en tanto y en cuanto nos brinde un buen resultado.
IMG_3929 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Una postura "de emergencia" para cuando no tenemos un punto de apoyo cercano y que contradice todo lo dicho anteriormente, es apoyar el lente sobre el hombro izquierdo y disparar de costado por sobre el hombro. Sorprendentemente y a pesar de ser una postura totalmente antinatural, el resultado es bueno. Esto es en parte debido a que a mayor distancia entre la mano de apoyo y el hombro, mayor posibilidad de temblequeo. Al apoyar sobre el hombro se disminuye y mucho el tembleque, pero conviene practicarlo un poco para que no esté en tensión el torso. Una variante de esta postura es apoyar el lente sobre el brazo izquierdo (mas precisamente sobre el lado externo de la articulación del codo) con la mano izquierda descansando sobre el hombro derecho. En mi caso los resultados no fueron tan buenos como para usar esta segunda postura muy seguido.
Tener en cuenta que estas posturas niegan la posibilidad de realizar correcciones de foco o zoom sobre el lente mientras realizamos el disparo. Estos parámetros deben ajustarse previamente.
Posición de rodilla en tierra, con el codo izquierdo apoyado sobre la otra rodilla. Sumamente estable si nos resulta cómoda.
IMG_7343 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
La regla general que se repite en todos lados es que para un sensor full-frame y un lente no estabilizado no se debe disparar a una velocidad de obturación menor a la de la longitud focal utilizada a fin de evitar trepidaciones (foto movida), pero como casi toda regla en fotografía, no es un absoluto sino una guía que ayuda a conseguir resultados aceptables. Por ahora tengámosolo como un punto de partida y avancemos sobre las causas y soluciones posibles.
La causa de la trepidación es el movimiento de la cámara durante el período que el sensor esta expuesto, y arruina por completo la nitidez de nuestra exposición. Si esperamos nitidez en nuestras fotos, entonces la trepidación no es aceptable en el resultado.
Para minimizar la posibilidad de trepidaciones existen accesorios, tecnologías y técnicas para ayudarnos.
Los accesorios pueden ser trípodes, monopiés, una piedra donde apoyar la cámara, un disparador remoto, etc. que nos permitan realizar el disparo del obturador sin depender de nuestras temblorosas manos.
Trípodes y monopiés ayudan a disminuír la ocurrencia de un trepidado, y a descansar los brazos durante sesiones largas, pero no siempre los tenemos encima o nos resultan prácticos para la situación.
IMG_7259 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Las tecnologías que ayudan son los estabilizadores de imagen (que pueden estar incorporados al lente o al sensor, dependiendo del equipo que usemos), el bloqueo de espejo (mirror lock-up) en las réflex que lo permiten, o el uso de flash para congelar el movimiento.
Pero el objetivo de este post es referirme a algunas técnicas básicas que pueden ayudar a disminuír la ocurrencia de trepidaciones, sobre todo cuando no dispongamos, o no sean prácticos, el uso de accesorios o tecnología.
Primero: Cuanto mas larga la longitud focal, mayor la posibilidad de tener trepidaciones a mano alzada. Esto quiere decir que es mas probable tener trepidaciones a 300mm de focal que a 18mm. Esto es debido a que con una longitud focal larga, lo que vemos por el objetivo es una parte muy pequeña de la imagen (un ángulo de enfoque muy estrecho) y es difícil mantener apuntado algo tan pequeño a pulso. Prueben con el tele mas largo que tengan, con el codo apoyado, enfocar un objeto distante (una antena en un edificio lejos, un árbol lejano) y van a ver que es dificil mantenerlo centrado. Esta dificultad de mantener fijo el sujeto un par de segundos es lo que produce la trepidación en las fracciones de segundo que dispara el obturador. La diferencia es que para nuestro ojo toda exposición es de 1/24 segundos siendo inmediatamente reemplazada por la siguiente exposición, y el cerebro corrige los defectos, pero para el sensor, no existe corrección.
Lo importante del párrafo anterior es que a mayor longitud focal se hace mas crítico el tema de las trepidaciones. Sobre todo porque a medida que la longitud focal es mas larga, precisamos velocidades de obturación mas breves, hasta el punto que puede que la luz disponible, la apertura o el iso no sean suficientes como para compensar. Me resulta muy común en los atardeceres tener que cambiar de lente porque la velocidad mínima con el teleobjetivo me resulta en una exposición demasiado oscura, mientras que con un lente mas corto puedo bajar la velocidad de obturación con menor riesgo de trepidación.
Gabriel Luque, quien es a mi juicio el mejor fotógrafo aeronático del pais, con su 500mm+extender x2 (1000mm) montado sobre un trípode con gimball que estaba probando. Mas tarde se cansó de usar el trípode (no le resultaba cómodo) y terminó disparando a mano alzada con longitud focal de 1000mm... y con una nitidez inigualable en las fotos que publicó.
Gabriel Luque by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
La primer técnica a utilizar es una buena postura de toma. Si uno está en una posición inestable, se va a mover durante la exposición y la foto va a salir trepidada. En muchos lugares se recomienda pararse con los pies en distinto plano (no paralelos) uno levemente mas adelante que el otro, y el pie trasero apuntando en ángulo hacia afuera. Se recomienda también mantener los codos pegados al cuerpo. Si bien esta postura es estable, muchas veces no es posible debido al tipo de toma que vamos a realizar, o puede que el tamaño del equipo nos impida poner los codos pegados al cuerpo. Mi recomendación es una postura que nos resulte natural y cómoda. Cualquier pose que nos ponga en tensión resiente el pulso, y resulta en movimientos involuntarios que no son deseables. Sin embargo, como nada es absoluto, algunas posturas poco naturales ayudan a generar un punto de apoyo en casos determinados y ensayarlas hacen que el cuerpo se acostumbre a hacerlas sin ponerse en tensión.
Una postura que al menos a mi me resulta incómoda y por ende, inestable. Si tuviera que realizar una toma desde ese ángulo, a una velocidad de obturación baja, apoyaría la rodilla en el suelo, pero nada es absoluto ni definitivo para todos. Esta señora debe tener mas equilibro que yo, o debe usar velocidades de obturación mas altas o un lente estabilizado.
IMG_4287 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Un lente mas corto o menos pesado permite mantener la mano mas cerca del cuerpo de la cámara, y el brazo de apoyo mas cerca del torso
IMG_0479 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Es importante que la mano izquierda sostenga el peso de la cámara cerca o en su centro de gravedad. En el caso de teleobejtivos largos, en general esto significa que la mano izquierda sostiene el teleobjetivo y no la cámara. Esto no varía para zurdos o diestros porque las cámaras tienen el obturador del lado derecho.
En este caso vemos que la mano izquierda sostiene el lente cerca del centro de gravedad, o del soporte de trípode que esta ubicado en el mismo lugar y con el mismo fin. Los codos no pueden estar pegados al cuerpo debido a que el sujeto de toma esta en una posición elevada. Sin embargo no es una postura forzada o tensa mas allá de lo necesario para la toma
IMG_3946 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Cualquier postura que nos brinde un punto de apoyo estable extra también es recomendable, por ejemplo apoyar el codo izquierdo sobre un objeto fijo como ser una baranda o el suelo, apoyar la espalda o un lado del cuerpo contra una pared, recostarse boca abajo en el suelo, o poner una rodilla en el piso pueden ayudar, siempre que no quedemos en una posición excesivamente incómoda o tensa, proclives al tembleque de manos.
En este caso, vemos que el peso del equipo cae sobre la cara de la fotógrafa. Nada aqui es una ley absoluta y la postura es válida en tanto y en cuanto nos brinde un buen resultado.
IMG_3929 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr
Una postura "de emergencia" para cuando no tenemos un punto de apoyo cercano y que contradice todo lo dicho anteriormente, es apoyar el lente sobre el hombro izquierdo y disparar de costado por sobre el hombro. Sorprendentemente y a pesar de ser una postura totalmente antinatural, el resultado es bueno. Esto es en parte debido a que a mayor distancia entre la mano de apoyo y el hombro, mayor posibilidad de temblequeo. Al apoyar sobre el hombro se disminuye y mucho el tembleque, pero conviene practicarlo un poco para que no esté en tensión el torso. Una variante de esta postura es apoyar el lente sobre el brazo izquierdo (mas precisamente sobre el lado externo de la articulación del codo) con la mano izquierda descansando sobre el hombro derecho. En mi caso los resultados no fueron tan buenos como para usar esta segunda postura muy seguido.
Tener en cuenta que estas posturas niegan la posibilidad de realizar correcciones de foco o zoom sobre el lente mientras realizamos el disparo. Estos parámetros deben ajustarse previamente.
Posición de rodilla en tierra, con el codo izquierdo apoyado sobre la otra rodilla. Sumamente estable si nos resulta cómoda.
IMG_7343 by Fernando A.K.A. Trífido, en Flickr